Manifiesto 8M Universidad Fernando Pessoa Canarias

Hoy, 8 de marzo, la Universidad Fernando Pessoa Canarias se suma a la jornada reivindicativa en la que se conmemora el Día Internacional de la Mujer, recordando la necesidad de mantener la lucha por la igualdad de derechos y oportunidades entre mujeres y hombres. Nuestras antecesoras han recorrido un largo camino que nos permite hoy poner en valor avances alcanzados en las universidades, donde no ha crecido únicamente el número de alumnas matriculadas, sino también el de profesoras, llegando a unas cuotas equilibradas entre hombres y mujeres. Aunque a nivel estatal, el techo de cristal sigue siendo patente ocupando un porcentaje inferior al 20% puestos de responsabilidad, en esta institución, la Universidad Fernando Pessoa Canarias, lo hemos roto. Las directoras de departamento superan ligeramente el porcentaje de hombres, las cuotas docentes son equilibradas y nuestras dos facultades cuentan con un decano y una decana respectivamente. También queremos dar a conocer las medidas concretas implantadas este curso, como la puesta en marcha de la Comisión de Igualdad, el establecimiento de un punto violeta situado en la biblioteca y en el campus virtual y la coordinación con la concejalía de Igualdad para continuar formando al alumnado y personal. Durante hoy y mañana, además, se celebran en las Jornadas del patrón de Psicología que llevan como lema “La mujer líder”.

Este año, nos adherimos también al lema propuesto por Naciones Unidas: “Igualdad de género hoy para un mañana sostenible”, que reconoce la contribución de mujeres y niñas en la lucha para la mitigación del cambio climático. En este sentido, queremos acordarnos de las mujeres palmeras que continúan haciendo frente al desastre natural que asoló la isla y que ahora, más que nunca, debe contar con ellas para la reconstrucción de un futuro sostenible para la Palma. Por último, se hace necesario hacer visible la realidad de las mujeres trans en Ucrania, con el fin de instar a la comunidad europea para que facilite una solución. La falta de legislación que les permita actualizar sus documentos de acuerdo a su identidad de género, está provocando que se les exija integrarse a las fuerzas de batalla y que no puedan desplazarse de su país a buscar refugio.

Estas situaciones de vulnerabilidad, las cifras de violencia de género, los impedimentos de conciliación que sufren las mujeres investigadoras o los comentarios machistas presentes en todos los ámbitos; dejan patente que aún queda lucha y la universidad debe ir por delante. Por ello nos comprometemos a seguir trabajando, este y todos los días del año.